Fernando Bermudez
Era la familia Suarez la más reconocida de la manzana. Tenía
la vivienda más vistosa con garaje donde guardaba una vieja pero bien tenida
camioneta Chevrolet, y se les consideraba los ricos del barrio. Eran los únicos
joyeros del pueblo, razón de su solvencia económica, pues los anillos, cadenas
de grado, bodas, bautizos, los elaboraban a la medida del comprador. Estaba compuesta por Alonso el padre de
aproximadamente 60 años de edad, Alfonso, Alberto y Laura sus hijos de 18, 17 y
15 años, quienes además de colaborar en las actividades familiares, estudiaban
bachillerato. Alonso hacía tres años era viudo por decisión de su esposa Tania,
quien un día cualquiera decidió colgarse de uno de los listones del techo de su
alcoba. Dicen las malas lenguas que no soporto más las constantes borracheras e
infidelidades de su marido, pues era de todos sabido que era habitual visitante
de la zona de tolerancia del pueblo, y que las fufurufas jóvenes y mejor
dotadas se lo disputaban por generoso.