Luz María Gómez
La complejidad del texto se siente desde las primeras páginas, pero a pesar de ella, quedamos atrapados y deseamos seguir leyendo. Un narrador en tercera persona nos cuenta la tragedia que vive su personaje principal Gregor Keuschnig, después de despertarse de un trágico sueño y lo peor, no poder desligarse de lo vivido en él. Gregor comienza a percibir la realidad de otra forma. Su entorno ya no le simboliza, se siente extraño y por fuera de él. Percibe su cuerpo y su psiquis, descompuestos, fracturados. Hay muchos ejemplos al respecto: Editorial Alfaguara, página 15 “No existe ningún “como para mí”, excepto que tengo que seguir viviendo “como yo”- esta idea le cortó la respiración. De pronto sintió como si estallara su piel y un amasijo de carne y nervios cayera mojado y pesado sobre la alfombra. Como si con esa simple idea hubiera ensuciado la habitación de la niña, se apresuró a salir de ella.”
Página 32 “Vio todo como por
última vez. Miraba a Beatrice y la estaba perdiendo. Él ya no le pertenecía a
ella, solo podía simular; tenía que simular. Algo crujió en su interior, luego
todo se desmoronó desordenadamente. Una fractura complicada del alma pensó.
Algunas astillas de sentimiento habían traspasado la capa protectora y él se
había petrificado para siempre.”
Hay infinidad de ejemplos que
señalan al protagonista con un fuerte trastorno emocional. Consulté sobre psicosis y esquizofrenia: “Una
de las psicosis más conocidas es la esquizofrenia. La esquizofrenia es un
trastorno mental grave, en el que el paciente no distingue con claridad entre
la realidad del mundo exterior y la realidad interna que tiene de su propio
mundo…”. La etimología de la palabra
esquizofrenia, nos aporta mucho. Leemos que proviene de dos términos griegos
que significan, uno de ellos: dividir, escindir, romper y el otro:
entendimiento, razón, mente.
Con base en la pequeña consulta, podríamos
considerar que Gregor vive durante dos días, los efectos de un episodio psicótico,
aparentemente generados por la vivencia de un dramático sueño. Otros síntomas
refuerzan su padecimiento: hostilidad hacia seres cercanos, estados paranoicos,
dificultad para conciliar el sueño, desubicación con el entorno, antes
familiar, que lo impulsa a caminar y caminar con ágil paso.
Podemos ver que, en plena crisis,
se inquieta por el desorden que observa en su casa, especialmente después de
que Stefanie lo deja. Siente una imperiosa necesidad por ordenar la casa:
Página 122: “Lavó los platos de la noche anterior, planchó unos pañuelos y
cosió un automático en un vestido de Agnes. Durante un rato se sintió muy
satisfecho y fue varias veces a contemplar el trabajo hecho.” Es
comprensible la angustia. El desorden exterior, le hace sentir con más fuerza
el desorden mental propio.
Si miramos cómo era la vida de
Gregor antes de su crisis emocional, nos enteramos de que la relación con su esposa
ya venía fracturada. El siguiente
diálogo, al comienzo de la crisis, ilustra la frialdad que trae la pareja.
Páginas 13 y 14 ““No significas nada para mí” No quiero seguir imaginando
que envejeceré contigo. No tienes nada que ver conmigo” “Rima”, dijo ella. Sí
se dio cuenta demasiado tarde de que las dos últimas frases rimaban- y así no
podían tomarse en serio. Ella ya preguntaba con los ojos cerrados: “¿Qué tiempo
hace hoy?” Él respondió sin asomarse al exterior:” Nubes muy altas”. Ella
sonrió y volvió a dormirse.
Es importante señalar las ideas
que subyacen en el diálogo, sobre la poesía. Es como si Handke nos dijera: lo
dicho poéticamente no tiene peso real. Merece también atención la simbología del
clima que aparecerá en diferentes momentos: “nubes muy altas”, presagia un
día soleado que invita más a la tranquilidad que a la preocupación. Así que
Stefanie, no toma en serio lo que Gregor dice porque habla poéticamente y
porque hace un buen día.
Si nos detenemos en el trabajo
que desempeñaba Gregor, nos damos cuenta de que es bastante mecánico, monótono
y por tanto poco creativo. Página 9 “Gregor Keuschnig vivía en París desde
hacía unos meses como encargado de prensa de la embajada austríaca.”
Página 19 “Su actividad principal
consistía en leer periódicos y revistas francesas, marcar artículos o simples
noticias que afectaban a Austria, luego presentar al embajador un resumen, a
diario si era posible, y escribir dos veces al mes un informe sobre la imagen
de Austria…” y en la página 144, comprobamos el gusto que siente por leer
obras literarias, tan ajeno al quehacer de su trabajo: leer periódicos. “Mientras
ella correteaba entre los demás niños, Keuschnig leía satisfecho las
descripciones de vestidos, tan frecuentes en las narraciones de Henry James.
Por fin algo que no era un periódico.”
El estado mental de Gregor se va empeorando.
Deambula por las calles. Gregor desea llegar pronto a su casa para ver a su
hija y para llegar antes del escritor austríaco que también lo estará esperando.
Los lectores conoceremos a dos nuevos personajes: Al escritor y a su
esposa Françoise. El encuentro es significativo. Nos enteramos de que el
escritor toma notas del comportamiento extraño de Gregor, éste lo advierte y se
lo hace saber. El diálogo descubre la personalidad fría y despreciable del
escritor, la forma cómo percibe a los demás seres humanos y su entorno y nos
percatamos de las historias que le interesa escribir; la de Gregor es una de
ellas.
Las páginas 89 a la 99, ahondan en las personalidades
del escritor, de Gregor, de Stefanie, y de Françoise. Muy interesantes las
imágenes que captamos de ellos. Merece mayor
atención, la percepción que el escritor personaje nos ofrece, sobre un Gregor
anterior y otro en plena crisis. Página 96: “Te he
visto hoy en la ciudad…Antes, cuando te veía de vez en cuando, tenías siempre
el mismo aspecto, y, sin embargo, cada vez parecías otro-era una bonita
sensación. Pero hoy estabas cambiado, porque intentabas desesperado parecer el
mismo de siempre. Parecías tan afanosamente el mismo que me asusté, como ante
una persona que ha muerto y cuyo vivo retrato vemos de pronto en la calle.”
Muy interesantes también, las
ideas que Handke, deja ver a través de Gregor, sobre los políticos y sus
seguidores. El personaje protagonista escucha un discurso de un presidente en
el que expone su plan de gobierno y nos expresa que muchas personas quedan seducidas
por las propuestas de los políticos, porque tranquiliza sentir que otro piense
por nosotros y nos organice la vida; él se incluye. Necesita con urgencia que alguien
le dé orden al caos en que se encuentra. Pienso que Handke de forma sutil,
plantea una fuerte crítica a todas aquellas personas que asumen una postura
pasiva ante los dirigentes políticos, confiándoles su futuro; nos deja ver que
ello no necesariamente le pasa a seres con estados o episodios psicóticos.
Páginas 70 a la 73. Destaco algunas ideas: “Como participante en la
conferencia de prensa sobre el programa del nuevo gobierno, Keuschnig se
sintió, de momento, completamente despreocupado. Aquí los signos de muerte eran
impensables. Keuschnig no necesitaba imaginarse el propio futuro ni temer
sorpresas; solo tenía que quedarse sentado y escribir eufóricamente
entre otros muchos colegas: eso era la paz.” “Ahora se sentía
curiosamente protegido, sabiendo que otros hacían política por él. Hacia tanto
bien pensar sobre uno mismo con las formulaciones de otros: el programa,
sobre el que iba tomando notas, le decía cómo era él y qué necesitaba; además,
¡con un orden!”
Hay un momento significativo en
la vida de Gregor que lo ayudará a regresar a la realidad; pero antes de esto él
ha visto unos objetos en la playa, que le dejarán una huella, un sentir
especial; la vivencia, cobrará gran sentido después. Son dos objetos infantiles
y un elemento de la naturaleza. La experiencia vivida y sus consecuencias, la
encontramos en las páginas 80, 81 y 82. “Entonces tuvo una vivencia-
y mientras la registraba deseó no olvidarla nunca. En la arena, a sus pies, vio
tres cosas: una hoja de castaño, un trozo de espejo, un pasador de pelo
infantil. Habían estado todo el rato así, pero de pronto formaron un conjunto
extraordinario. - ¿quién dice que el mundo ya está descubierto? -Estaba
descubierto solo en lo que se refería al misterio, con lo que algunos defendían
sus certezas frente a los otros; …Pero los objetos soñados que veía en el suelo
no asustaban. Le daban, por el contrario, tanta confianza que no podía quedarse
quieto.”
La experiencia vivida es
importante porque anticipará en él, sin saberlo, el hecho que lo ayudará a salir
de la esquizofrenia. El hecho trascendental que surgirá es el acercamiento a su
pequeña hija Agnes. Paradójicamente, rescata la relación con su hija, en el
momento en que su esposa lo abandona. Sorprende que Stefanie le deja a la niña
a Gregor, en pleno caos emocional; pero la encrucijada determinará que comience
a salir a flote. La convivencia en un
comienzo es crítica y en ciertos instantes, teme hacerle daño; pero lo hermoso
en medio de tanta tragedia es que, a partir de la observación detallada del
comportamiento de la niña, Gregor comenzará a sentirse bien; percibe su sencillez,
su espontaneidad, su alegría y a su vez sus temores.
La aproximación a Agnes le despertará nuevos
sentimientos y una sensibilidad
extraviada. Comenzará a darse cuenta de que las personas y el entorno le
importan y le significan de nuevo y con más intensidad y decide planear un nuevo
futuro. Página 132: “La comida se había secado.
Apartó el plato y miró a Agnes, que untaba pan blanco en la salsa. Acodada en
la mesa, y exclusivamente ocupada con la comida, sonreía. Las cosas más
cotidianas le hacen sonreír, pensó. En este momento no añoraba un estado
parecido: solo le alegró pensar que quizás ella nunca necesitaría una aversión,
un odio y un espanto como los suyos.” La avenencia con Agnes, le posibilitará
a su vez, recordar con otras sensaciones su infancia. Ver páginas 139 y 155.
El inicio del momento de la sensación verdadera que le da título al libro,
aflora cuando Gregor, en su primer día de crisis, llega a su casa, y le
pregunta a Stefanie por la niña. Ella le dice que está dormida. Él insiste en
verla, se aproxima y precisa cómo conciliar el sueño en los últimos instantes.
La vivencia generará el comienzo de una nueva sensación que desencadenará
otra serie de sensaciones, que a su vez lo ayudarán a encontrarse de nuevo con la
realidad. Páginas 88 y 89: “La niña estaba cantando en su cuarto. Keuschnig
logró entrar sin que se diera cuenta. ¿Qué hago aquí?, pensó distraído. Al
acercarse a la niña afirmaba algo que ya no tenía vigencia. Tengo que
reflexionar sobre ella para volver a
sentir algo por ella…Por fin dormía…Keuschnig se incorporó, impregnado y
consciente de una tristeza nunca sentida. Esta tristeza le hizo perder el miedo
a los otros. Se alegró de reunirse con ellos.”
Las nuevas sensaciones,
señalan armonía con el entorno y un fuerte deseo de empezar un cambio. Las
podemos leer en las páginas 137 a la 141 y en las que siguen partir de
la página 150 hasta el final. En las páginas 139 y 140, podemos leer: “Tengo
que hacer algo, pensó desesperado, y apenas lo hubo pensado, dijo confiado a la
niña: “Empezaré a trabajar. Inventaré algo. ¡Necesito un trabajo en el que
poder inventar algo!”. Agnes, que no había oído más que su voz, respondió con
un saltito despreocupado, y Keuschnig sintió por primera vez en mucho tiempo
amistad por ella y no indiferencia distraída y cariño temeroso.” Y en este
vivir de nuevas sensaciones, vuelve a recordar los objetos vistos en la playa y
su vivencia cobrará más sentido. Ver páginas 151 y 152: “Keuschnig no
deseaba ya nada para sí mismo. Las cosas habituales bailaban delante de
sus ojos como si fueran apariciones-apariciones naturales-, y cada una le
mostraba una riqueza inagotable…Este estado no era un capricho ni una emoción
pasajera que enseguida terminaría, sino una convicción con la que se podía
operar conseguida a partir de tantas emociones pasajeras también. Ahora la idea
que le había asaltado al ver las tres cosas en la arena del Carré Marigny le
pareció utilizable. El mundo, al volverse misterioso, se abría y podía ser
reconquistado.”
El final de la obra es bastante
interesante. La niña se le ha extraviado en un parque de juegos; sin embargo,
Gregor no se desespera, sigue caminando y percibiendo nuevos sentires. Llega a
una cima. De pronto se da cuenta de que el escritor lo ha venido siguiendo. Le
informa sobre el paradero de la niña y su mujer. Tienen un diálogo bastante
frío. Páginas 156 y 157. El escritor le recuerda una película que han visto
juntos en la que la protagonista se suicida bajo un cielo nublado. Sabemos por
las páginas anteriores que el clima predominante es el verano. Aparece de nuevo
la simbología del clima asociada a los estados de ánimo. Es como si el escritor
le dijera: no te quitarás la vida.
El final es abierto. En el último
párrafo, el narrador nos describe a un personaje que no nombra; podemos deducir
quién es por el nuevo traje que usa y por el lugar al que se dirige con su
andar rápido. La compra del nuevo traje y el uso que hace de él, al final,
simbolizan la nueva vida que acaba de emprender. Vale la pena destacar que la
idea la obtuvo después de leer un libro del escritor Henry James, que describe
muy bien los vestidos. El acercamiento a la literatura lo logra a
partir del acercamiento a su hija. Páginas 144 y 145 “Leyendo y leyendo se
alegraba de que luego iría a comprarse algo por primera vez desde hacía tiempo.
Se imaginó cruzando una plaza con un traje nuevo de verano color claro. ¡Con
todas las cosas nuevas que le sucedían y todas las viejas que no debía olvidar ¡Tenía
que vivir una historia insólita!”
La novela presenta pasajes
poéticos con ideas profundas, especialmente cuando describe el
clima, algunos estados emocionales y los diferentes entornos de París. Hay
infinidad de ejemplos. Las dos primeras citas, al comienzo de este escrito (páginas
15 y 32) son representativas. Citaré otro ejemplo. Páginas 76 y 77: “El sol
se puso y al momento las cosas empezaron a relucir por sí mismas,
mientras caían las sombras en el aire que flotaba entre ellas. Durante un rato
las cosas brillaron violentamente, como si se deshicieran en energía luminosa.
En la penumbra vibrante Keuschnig no distinguía los detalles. Un nuevo sistema
había descendido.”. Las frases que anteceden y preceden a la cita, sostienen
un pensamiento agudo y poético.
Handke a partir de su protagonista
psicótico, detalla con precisión rasgos de su comportamiento emocional; pero lo
más interesante es que muchos de estos rasgos aplican al comportamiento humano
en general. Muestra a seres hostiles, enajenados, vacíos. Un ejemplo claro es
la visión que da de las personas que siguen ciegamente a los políticos. Otros
casos aparecen cuando describe los comportamientos de la esposa de Gregor, su
amante Beatrice, la del escritor y su esposa.
El personaje de Gregor con su conmoción
mental, es una metáfora del desasosiego del ser humano contemporáneo, atrapado
por un mundo material, que le ciega y no le permite disfrutar de las
situaciones sencillas y espontáneas. La observación de los objetos en la playa,
le iluminan un camino que simboliza un mundo infantil, sencillo y natural. Lo recuperará
al acercarse de nuevo a su hija. Podrá
ver en ella, sensaciones perdidas: sencillez,
espontaneidad, naturalidad, alegría. Como
si fuera poco, la literatura le llegará como una gran aliada para asir la luz
que ya lo encausa. Lo sentimos cuando lee una obra del escritor Henry James,
mientras su hija se distrae en el parque.
Otro mérito de la obra es la
ruptura que vemos en algunos aspectos con la novela tradicional. Cuando nos
llegan los personajes del escritor y su esposa, arriban sin una introducción y
sin la descripción de un entorno; simplemente comienzan a hablar y a actuar y
para complejizar aún más, los personajes dialogan sin que se marquen sus
intervenciones con un guión. Los lectores
sentimos la imperiosa necesidad de identificarlos, no sólo a ellos sino al
contexto que los enmarca. Contrasta con las anteriores rupturas, el narrador
que nos presenta Handke para orientar los hilos de los personajes con sus
pensamientos y acciones. Distinguimos a un narrador en tercera persona y omnisciente,
tan común en la narrativa tradicional.
Luz María, cuando presentaste el análisis del libro, me gustó mucho los argumentos que sostuviste para sustentar tu tesis. En muchos puntos estuve de acuerdo contigo en otros diferi un poco, pero en estos debates es cuando se potencializan y enriquecen los saberes. Felicitaciones Luz María por la solidez y energía en este análisis que como bien lo dijiste en su momento fue una obra que te tocó defendiste muy bien tus planteamientos.
ResponderEliminar