Vistas de página en total

jueves, 9 de mayo de 2013

Llanto


                                                       Eliseo Cuadrado del Río 
            


La mayor parte de las veces un episodio de llanto confiere a quien llora un descanso interior parecido a la sensación de pérdida de peso al introducirse hasta el cuello en un recipiente lleno con agua. El recipiente puede ser una piscina recubierta de azulejos hindúes, una pequeña laguna o un remanso de agua de mar. Esta sensación de liviandad es explicada despiadadamente por la ciencia, pero nos queda el recurso de la poesía para devolverle el lirismo perdido.

 Dicen los poetas que el llanto es una forma de transmitir, con lenguaje corporal, mensajes de consolación. Quien llora descansa y si lo hace inexplicablemente y en público, el efecto del consuelo es mayor. Después del episodio, todos respiramos mejor, el taco que sentíamos en el pecho desaparece.
            La presencia de las lágrimas emociona y conmociona y todo ser humano normal recibe con alborozo cualquier manifestación de compañía. Es el primero en sorprenderse al saber que necesita un lenitivo. Que su felicidad era una hipótesis.
            Se llora de diferentes maneras. A los gritos. En silencio con o sin lágrimas. Al darse cuenta que las palabras no salen. O suenan a cristal roto.
            No pierda su tiempo en buscar la causa de su llanto o el de los demás. Si le dan ganas de llorar, llore, que las lágrimas son un poderoso calmante en espera de un mago que descubra el mecanismo de su acción.
            A veces es el inicio de un duelo aplazado escondido detrás de un muro de negación.
            Hay muchos familiares y amigos que se van prematuramente. Pero antes que ellos, con frecuencia, lo primero que se pierde es la juventud. Se llora al ausente en ciertas fechas, como en su onomástico. O al contemplar su fotografía. Es estas situaciones el llanto es un referente importante: El duelo termina cuando en estos momentos se siente alegría porque  los recordamos.
            Por último, lo más importante: Los hombres también lloramos. El llanto no quita lo macho. Por otra parte muchos no lo aceptan. Posiblemente porque no se dan cuenta cuando lloran. Una sobredosis de ron produce amnesia.


          

No hay comentarios:

Publicar un comentario