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miércoles, 20 de noviembre de 2024

Una serenata: el bolero


 Jesús Rico Velasco   

Entre gente que canta

Siéntate con confianza

Porque los malvados no tienen canciones.

Goethe

  


El bolero nació en la isla de Cuba en el siglo XIX y comparte su nombre con el llamado bolero español una danza  surgida  en España en el siglo XVIII. El típico cubano escrito  alrededor de 1840, y  se acepta como primera canción el bolero  Tristezas escrito por el cubano José Pepe Sánchez en el año 1883 con acompañamiento   clásico de guitarras y percusión. El bolero evolucionó de música de cantinas y peñas a “música de serenatas” para todas las clases sociales. Amarrado al amor que se expresa en las clásicas serenatas con tríos que cantan en una ventana a una fémina al otro lado para decirle “te quiero”.

jueves, 31 de octubre de 2024

Un epitafio amarillo

 Juan Pablo López

 

 

Un epitafio amarillo

«Nunca sonreíste, nunca me miraste,

Nunca sentiste el sol. Este mundo no te quiso,

pero tu nombre te dio vida, me dio vida»

 

 


— ¡Hermosa, levántate! Vas tarde para el trabajo.

Silvia abre los ojos, mira alrededor, él no está ahí, se ha levantado temprano para prepararle el desayuno, un ritual que lleva  cinco años desde que se conocieron. Ella revisa las notificaciones, nada importante, cierra de nuevo los ojos y respira de forma profunda, baja los pies buscando sus chanclas, revolotea un poco antes de encontrarlas. Todos los movimientos de Silvia son lentos, como si cada articulación le pidiera a la otra con desdén que se moviera. Se dirige al espejo: ¿Por qué sigues aquí? ¿No ves las cosas?, piensa, mira bien todo. Su imagen comienza a hacérsele borrosa y el cuerpo a ganar peso, Silvia cubre su rostro con las manos.

 — ¡Estoy haciendo huevos revueltos, espero que te gusten!

— ¡Sí, sí!

— ¡¿Te pasó algo?!

— ¡No, nada, me voy a bañar!

Abre la ducha y un chorro fuerte la recorre. El llanto es ahogado por la sonoridad del agua mientras lentamente, como el caer de una hoja, Silvia se va acurrucando hasta convertirse en un diminuto punto que pide ser el final de una historia ¿Por qué no me alejé? ¿Por qué le permití entrar? Tú no tenías la culpa, no podías hacer nada, soy yo la que no debió (…). El punto se comprime, sus manos se funden con el vientre, la ducha comienza a convertirse en mar y los pensamientos de a poco a naufragar.

miércoles, 30 de octubre de 2024

Tres corazones y un tango (cuento con aire de tango)

 

Eduardo Toro G

 

Son cosas del percal,

 tristezas de percal…


Amanece en Corrientes y toda Buenos Aires despierta cuando se apaga el trasnochado lamento de los fuelles; la luz de un farol muere sobre la cabellera rubia de una linda mujer quien, entre los brazos de dos hombres, equivoca los pasos de un gastado charol.

La Guajira

                                                         

 

Jesús Rico Velasco

 


La pobreza  es una realidad   que afecta   gran parte de la población en la Guajira.  Más de la mitad de la población  vive portando en sus hombros la pesada carga de ser pobres en medio de unos paisajes hermosos que no se comen. Como siempre a la pregunta al levantarse es: ¿qué vamos a comer hoy? ¿Pescado otra vez? Cada vez más escaso y difícil de conseguir, frente a un generoso e inmenso mar .  No hay dinero para comprar la gasolina de la canoa o la lancha.  Hay que salir a la calle para buscar y encontrar algo. Parece  mentira pero  el 90.6% de  la gente afuera en la calle  vive de la  informalidad, pescar para venderle al turista o  convencerlo,  llevarlo a pasear y mostrarle los paisajes. Negociar algo  de lo que se tiene en la mano: un tejido wayuú, un sombrero, un chinchorro, una hamaca. Cualquier cosa para poder comer. 

Celos infernales

Alexandra Correa

 


Despierto al escuchar los nudillos golpear el parabrisas.

-Papá entre a la casa y acuéstese, no duerma en el carro. Mi mamá aún no se ha levantado, voy camino al colegio ¡Lo quiero mucho!

La veo correr mientras se aleja y pienso en qué momento se creció mi niña. Decido no entrar a la casa e irme de regreso al trabajo.

miércoles, 23 de octubre de 2024

La vejez

 

 

La vejez

 

                               Jesús Rico Velasco

 


En las edades avanzadas las mentes lúcidas deben seguir produciendo conocimiento y dejar que su curiosidad indague sobre los fundamentos de la vida para  llegar  con  sabiduría a otras personas. Los  dueños   de mentes admirables tienen un compromiso de enviar  mensajes,  ayudar, y compartir lo que saben y no  conformarse con  desayunar y quedar desocupados. Deben  exigirle al cuerpo movimiento, a la vida retos y a las relaciones humanas, calidez y  expresiones de afecto. La rutina para poder organizar la mente y la vida  es señalada por las comidas con  una marcación del correr del día.  Son momentos claves para degustar alimentos de sabores y olores agradables y compartir un poco con las personas con quienes se convive.

 La escritura y la lectura  deben considerarse  estrategias para ocupar  el tiempo disponible. Son actividades que  mantienen la mente activa y útil en la medida en que  el cuerpo biológico  responda  a la actividad física de sentarse con un lápiz y un papel o frente al computador  a escribir a pesar de los desgastes visuales propios de la edad. Lograr que el cerebro establezca las conexiones neuronales necesarias y dicte con coherencia los pensamientos para  plasmar  sentimientos y experiencias en palabras para contárselos a otros.  

lunes, 7 de octubre de 2024

La conquista

 



 

                                                            Alexandra Correa

 

Hace quinientos treinta y dos años llegaron los españoles a América. Invadieron e irrumpieron,  tomaron por la fuerza nuestras tierras, borraron de nuestra mente el raciocinio y formas de pensar. Impusieron su Dios porque era mejor que el nuestro  y nos obligaron a aprender su idioma. Le vendieron la idea al mundo que éramos salvajes porque tratábamos de defendernos de sus atrocidades. Amputaciones de manos, violaciones, aperreamientos -con grandes perros hambrientos- torturas, matanzas. De esta manera fuimos obligados a tomar su cultura y creencias, perdiendo nuestra identidad. Entonces ¿quién fue en realidad el salvaje? Con su llegada  trajeron consigo enfermedades y epidemias, para las cuales no estábamos preparados, dejando a su paso muerte y desolación. Durante generaciones nos contaron una historia, la de un ser supremo conquistando a América, un hecho difícil de ensombrecer, ignorando las formas que se utilizaron para invadir, conquistar y asentarse.

Sombras

 Jesús Rico Velasco


                     Hay sombras que caminan en el silencio profundo de la noche, formas nebulosas que se mueven  como efugios de la imaginación de Rodin con la pose dolorosa de la  perdida de la inmortalidad de Adán en el paraíso terrenal. Las colocó el artista en la puerta del infierno para recordar el mensaje que escribió Dante en La Divina Comedia, “Quienes aquí entráis, abandonad toda esperanza”. Las sombras entran por debajo de las cortinas, por los postigos de las ventanas, por el pequeño hueco por donde transitan los insectos predilectos de la metamorfosis de Kafka destruidos por la alienación que produce la vida con condicionamientos individuales y colectivos de orden económico, social y cultural. Entran sigilosas en las alcobas  y se  alojan  en las mentes  de las personas que no se  no se asustan con la soledad, son como los fantasmas de la memoria que atormentaron a García Márquez en su anticipada vejez. Son las sombras del agotamiento de los mitológicos Buendía   salidos de la  imaginación marquesina  y la  realidad de unas personas que no mueren de enfermedad como el resto de los mortales, sino de soledad. Son las sombras construidas por Borges en un punto imaginario que permite observar el universo en todas las direcciones posibles. Es un punto en la imaginación en forma de circunferencia   desde donde se puede mirar todo el infinito con un acceso breve y único en el Aleph que muestra todos los rincones de la existencia. Son sombras que caminan en la noche que quieren  hablar y decir algo, pero no tienen voz, son sombras grandes y pequeñas  un montón de sombras, infinitas  como las mentes de los genios que sueñan con las sombras. Es un agujero negro que no tiene forma como la sombra. Es el Canto del cisne de Chejov al sentir la vejez  que lo acosa a  pesar de su talento, es la soledad y los años que marcan el tiempo para morirse.  Es el gato negro de Poe horrible bestia  emparedada en su tumba sin sombra que lo indujo a cometer un cruel asesinato. Son las sombras ambulantes de los muertos que salen a buscar las mentes de los soñadores  que  no pueden descansar. Son las sombras de Silva enlazadas que se juntan en las noches oscuras y de lágrimas.

Muchas sombras una sola sombra larga que me espanta el sueño y no me deja dormir.

miércoles, 2 de octubre de 2024

Un día en el cementerio

 Jesús Rico Velasco

 

De acuerdo con las enseñanzas cristianas el cementerio es el lugar en donde los muertos “duermen” hasta el día de la resurrección. Son sitios   para el descanso eterno, en latín  “requiescat in pace” (RIP), en inglés “rest in peace” (RIP), y en español “descansa en paz” (QEPD).  Las sociedades determinan los lugares, los ritos y ceremonias para la disposición de   los cadáveres en tierra, incinerados en crematorios  . En algunas culturas  se queman en hogueras  al aire abiertos de acuerdo con los ritos y ceremonias  asociadas con   valores y patrones culturales de tipo religioso o filosófico. En los cementerios hay tristeza, nostalgia y soledad que acompañan el   dolor de los vivos ante  la presencia de la muerte de sus seres  queridos.  Con la muerte hay separación inevitable del cuerpo y del alma, el cuerpo se corrompe y se vuelve cadáver. Queda el espíritu en los espacios desconocidos del más allá lejos de la comunicación verbal. Los muertos no hablan y no se comunican con los vivos, sus almas esperan ser despertadas para el juicio final  según los dogmas de las prácticas religiosas y filosóficas cristianas. 

 

viernes, 13 de septiembre de 2024

¿Por qué escribo cuando leo?

 “Cuando lees un libro abres la puerta de tu mente a lo infinito”

 Alexandra Correa 

Desde épocas remotas el ser humano se ha hecho entender mediante gráficos, jeroglíficos, arabescos y letras. Pensando cómo llegar a otros.

 

Los libros son compañía, conocimiento, diversión, brindan lo mejor sin pedir nada a cambio, son una invitación a lo desconocido, ideas plasmadas en el papel, historias narradas por el autor tratando de envolvernos, sintiéndonos identificados con los personajes y las tramas. Sus hojas despiden olor a conocimiento. Años de investigaciones de los autores que han desembocado en descubrimientos. 

Los libros nos enseñan a conocer el pasado, vivir el presente y visualizar el futuro. Nos acercan a la historia, comprendemos de dónde venimos y por qué somos como somos. La narrativa nos da otras formas de ver el mundo, desde otras mentes y visiones. 

Lectura y escritura van de la mano.  Hay que leer para tener que escribir, solo así fluyen las palabras, reflexiones, formas de pensar y vivencias.

miércoles, 4 de septiembre de 2024

La vida, la selva y un rio

 Jesús Rico Velasco

Un rio muy largo y muy ancho en los valles con orillas de diez kilómetros de distancia en algunas partes y   aguas turbias achocolatadas con vida vegetal, animal y humana  en sus siete 7000 kilómetros de recorrido. Su caudal medio es de 100.000 metros cúbicos por segundo y su desembocadura, en el estado de Pará (Brasil), forma un gran estuario de 240 kilómetros de ancho. Nace en los andes peruanos y de gota en gota comienza a resbalar por las laderas  que chorrean del nevado Mismi. Difícil determinar los primeros contribuyentes, pero los científicos, geólogos y geógrafos mencionan como primer aportante  el rio Apurímac que cae torrentoso por las montañas  de la cordillera oriental.

 


Millones de personas viven en los alrededores del rio, se conectan con la selva, en uno de los ecosistemas fluviales de mayor biodiversidad del planeta. En sus aguas viven más de 2.500 especies de peces mostrando la ictiofauna más diversa del mundo. De acuerdo con mi amigo Richard Evans Schultes (1915-2001)  a quien conocí en Bellagio (Italia) la riqueza bilógica de la Amazonía es inmensa, todavía con especies desconocidas  en la botánica.  Profesor de la universidad de Harvard que en la década de 1940  se interesó por el desarrollo y utilización del caucho como producto necesario en la segunda guerra mundial.  Durante años se internó en las profundidades de la amazonia colombiana  estudiando las propiedades  farmacológicas de  plantas y  hongos.

miércoles, 28 de agosto de 2024

La oportunidad de los feos

 Jesús Rico Velasco

 


Ya había terminado los estudios de sociología en la universidad nacional y me había ganado una beca para ir a estudiar a los estados unidos. Al principio creía que todo era sencillo y fácil. Se me ocurrió que como estaba en Washington y estudiaba un curso de inglés en el ELS  podría en principio  comenzar   a estudiar algo relacionado con la planificación urbana, con la construcción de viviendas que había estudio  en el CINVA en Bogotá. Ya habían pasado los días del verano julio y agosto y era un tiempo de decidir  que iba a estudiar. Tenía la beca que me había dado la universidad nacional. El ELS era un programa amarrado con la Universidad Católica que quedaba muy cerca de la universidad. Estaba emocionado le veía posibilidades a mi pensamiento de estudiar algo relacionado con Planificación Urbana.

El crimen de la habitación 120

 Jesús Rico Velasco

 Los acontecimientos que les voy a narrar están basados en hechos reales con algunos elementos ficcionales sobre incidentes misteriosos que no podrán  conocerse con precisión por estar por fuera de la imaginación. Los fantasmas de la memoria regresan de los rincones de nuestro subconsciente para traer el   recuerdo de eventos que nos han ocurrido   y que en su momento no  tenían importancia, ni significado trascendental. Se enredan en el secreto de lo que puede ocurrir por efectos del azar, de un accidente, un posible acto íntimo de quitarse la vida o desaparecer como resultado de trastornos psicológicos: angustia, miedo, depresión, o por un  acto criminal producto de mentes perversas, perpetuado en  el silencio macabro de la mitad de la noche. 


 La mente crea un doble ambiente de enigma y realidad.  Los sonidos ocultos, el susurro de las voces, el chirrido  de una puerta que se abre, el ruido del agua corriendo en una regadera.  ¿Dónde encontrar los detalles para explicar el golpe mortal  cuando cayó al piso y se abrió la cabeza    o la violenta acción que partió en dos la espina dorsal?  ¿Una discusión o un altercado de dos corazones atormentados  en una noche de farra  con  el efecto del licor incontrolado  que deciden  tomar una ducha, y encerrarse en el baño para intentar apaciguar los arrebatos?  ¿Un asalto a mano armada   con intenciones de robo y la huida  con algunas huellas  de violencia corporal?   ¿Un acto premeditado de suicido?  ¿Qué fue lo que realmente ocurrió  esa noche del 7 de marzo del 2007 en la habitación 120 de un hotel cinco estrellas en la ciudad de Cartagena?

miércoles, 14 de agosto de 2024

Pegando las piezas

 Alexandra Correa 

Siento un enorme vacío, debido a tu partida. Es el nido vacíoFamilia, risas y crispetas, alrededor del televisor, común denominador de las noches en familia.

 Durante años la casa estuvo invadida de gritos, lloriqueos, carcajadas y parloteo. Hoy solo ronda paz y quietud. La lejanía de los hijos se siente en los poros y los oídos que zumban debido al silencio, los planes disminuyen, el tiempo pasa lento, el agite se acaba. Mi madre decía “los hijos son importantes para que te cuiden en la vejez”. Nunca lo vi así. Lo que menos deseo es ser carga para nadie.  

 


El famoso “nido”, espero les sirva para coger impulso, volar lejos, emprender el rumbo, empollar fuera de mis alas. Los hijos nunca piden venir al mundo, no firman un contrato de pertenencia, y mucho menos los podemos atar a la pata de nuestra cama. Solo es esperar el momento adecuado para emprender el vuelo. Después de la partida solo quedan los recuerdos, la nostalgia, los momentos vividos.

 

Charles Darwin en las Islas Galápagos

                                                                                   

Jesús Rico Velasco

 Hay que tener mucha fortaleza mental para realizar un viaje de cinco años en un velero, circunnavegar la tierra y trabajar de manera gratuita  como lo hizo Charles Darwin desde  el 27 de diciembre de 1831 hasta octubre 2 de 1836 como  naturalista en el “Beagle”. El amor por la ciencia era una característica de  su espíritu curioso  convencido  de que  la  observación  y la experimentación eran las bases para  la construcción del pensamiento científico. Los tres años de formación académica en Cambridge  los consideró  perdido en la   construcción de su pensamiento, obtuvo un diploma de “Bachelor of Arts B.A”.

 


«Si puedes encontrar a alguien con sentido común que te aconseje aceptar ese viaje, entonces  te daré mi consentimiento.» Le dijo su padre antes de acceder a que Darwin realizara el viaje. Su tío Josiah y otros miembros de la familia Wedgwoods  dieron sus opiniones y argumentos   de apoyo  para que Darwin aceptara la posición de naturalista ofrecida por el capitán Fitz-Roy  en la expedición del Beagle obteniendo finalmente la aceptación de su padre. 

 En el recorrido del camino de mi vida como  trashumante se me ocurre  recordar  el viaje realizado  con mi  familia  a las Islas Galápagos en el Ecuador. Las experiencias científicas de Darwin    desde mis estudios de doctorado en Ohio State University (1987-1992) fueron una inspiración en la definición de los componentes teóricos profesionales.    Este viaje  iluminó mis pensamientos  sobre   los componentes  de  la  teoría del  origen de las especies naturales incluyendo al hombre. Darwin afirmaba que todo lo que existe en la naturaleza está sujeto a leyes   de variación  y selección natural. No es la idea de triunfo del individuo más fuerte  sino del que mejor se adapte. 

lunes, 5 de agosto de 2024

 La naturaleza del caracolí


Jesús Rico Velasco


Con los cuerpos pegados a su tronco y nuestras manos sujetadas formábamos una cadena de brazos que en completa extensión a duras penas abarcaban un tercio de su envergadura. Había crecido por naturaleza en uno de los rincones de la parcelación   de Guacarí  hace por lo menos unos 50 años atrás  arrinconado contra los límites de un cañaduzal.

miércoles, 31 de julio de 2024

Cenizas amargas

  


Tus palabras tajantes aun retumban en mis oídos

Huyes como ave en medio de la tormenta

Hoy todo es soledad

Los recuerdos van y vienen

Ni matándolos, morirán

Inevitablemente perduraran

Difícil será la vida con tu ausencia

Los lugares parecen no existir

La desolación me está oprimiendo

Las palabras enmudecen

La tristeza ha vuelto a mi

La noche se ha hecho más oscura

Eternamente mi alma pegada a la tuya

De mis manos brota sangre

El amor agoniza

El viento eleva las cenizas

Es un sepelio

El féretro arde

Es el final sin retorno.

Alexandra Correa

Yaburi de los milagros

 Jesús Rico Velasco



Eduardo Toro Gutiérrez nacido en Anorí Antioquia en el año de 1934  tiene 90 años y está perfecto. Cuando niño vendía empanadas en Palmira en un canasto para ayudar a su familia a sobrellevar la vida. Es un intelectual de la literatura, un soñador de las letras, un manejador de la palabra, un antioqueño de verdad, nacido y criado con verraquera que se le midió a todo.

La capa protectora  de la novela representa la fuerza de la vida y de la tierra  como la pintó Daiara Tukano perteneciente a un  pueblo indígena  para su tío afectivo Eduardo. Es el trasfondo espiritual que puso Dios en el génesis  en el paraíso terrenal para iluminar la vida con la naturaleza y su fuerza en  el amor de la pareja y su creador.

miércoles, 24 de julio de 2024

Exaltación al gran poeta y novelista hispanoamericano Álvaro Mutis Jaramillo

 Jesús Rico Velasco

 


El 25 de agosto de 1923 nació en Bogotá uno de los grandes autores de la lengua española: Álvaro Mutis Jaramillo. Leer las Empresas y tribulaciones de Maqroll el Gaviero fueron una entretención que  me acompañaron durante los días de  aventuras  cartageneras al lado de mi esposa. La dedicación a la lectura juiciosa y apasionada de sus obras fueron un deleite en nuestro apartamento alquilado a orillas del mar, mientras los jóvenes y pequeños lectores sentados en las escaleras devoraban el recién publicado libro de Harry Potter. Para nosotros la búsqueda de las obras de Mutis como valiosos tesoros  aumentaba la admiración por el autor en la medida en que avanzábamos en la lectura organizada por títulos independientes. El primer libro que adquirimos en una librería del centro histórico fue   La nieve del Almirante (1986), los demás fueron llegando: Ilona llega con la lluvia (1988), Un bel morir (1989), La última escala del trump steamer (1988), Amirbar (1990), Abdul Bashur, soñador de navíos (1990), Tríptico de mar y tierra (1993). Las siete novelas  quedaron perdidas en los anaqueles de nuestra pequeña biblioteca hasta perderse de nuestra vista y recuerdos. Hoy se encuentra  una bonita publicación de la editorial Alfaguara en 1997. Gabriel García Márquez   vecino y amigo en ciudad de Méjico por muchos años señaló: « La obra completa de Álvaro Mutis, su vida misma, son las de un vidente que sabe a ciencia cierta que nunca volveremos a encontrar el paraíso perdido. Es decir: Maqroll no es sólo él, como con tanta facilidad se dice. Maqroll somos todos».

miércoles, 17 de julio de 2024

Hoy conocí a Bolívar

 

Jesús Rico Velasco

 

La cabalgata  debía salir de la plaza central de Yumbo a las diez de la mañana para tomarse el parque  del corregimiento de Mulaló hacia las horas del medio día. Montaba a Pintura, una  hermosa yegua azabache de paso, regalo de uno de   mis alumnos, el médico Edgar León Uribe  del posgrado de administración  en la Escuela de Salud publica de la Universidad del Valle. Los  jinetes hombres risueños y tomadores de trago habían empezado a beber aguardiente  desde temprano,  su alboroto fue silenciado por la aparición casi celestial del general Simón Bolívar, montado en un magnífico  caballo de musculatura definida, pelaje níveo y lustroso   llamado  Palomo, famoso por ser usado en las incontables travesías   del Libertador.

«¡Viva mi general Bolívar, viva el libertador!  ».  Gritaron en una sola voz todos los caballistas.

 En medio de la multitud  empujé los pasos de Pintura   para acercarme a la figura del gran actor. Era  Pedro Montoya personificando con talante y garbo al mismo Simón Bolívar montado en su caballo blanco. Lo saludé con mucho entusiasmo y le dije,  « Feliz de saludarlo  mi General, estamos muy contentos de tenerlo  en los territorios por donde pasó el Libertador en los tiempos de la Independencia.»

miércoles, 3 de julio de 2024

El coronel no tiene quien le escriba (revisitado)


 Jesús Rico Velasco 

El coronel destapó el tarro del café y comprobó que no había más de una cucharadita. Retiró la olla del fogón, vertió la mitad del agua en el piso de tierra, y con un cuchillo raspó el interior del tarro sobre la olla hasta cuando se desprendieron las ultimas raspaduras del polvo de café revueltas con oxido de lata.

En ese momento empezaron los dobles. La mujer pensó en el muerto.

-Nació en 1922- dijo- Exactamente un mes después de nuestro hijo. El siete de abril. –Ya debe haberse encontrado con Agustín – dijo-pueda ser que no le cuente   la situación en que quedamos después de su muerte.

-A esta hora estarán discutiendo de gallos- dijo el coronel.

«Todo está así», murmuró, «Nos estamos pudriendo vivos».

Vivían en el extremo del pueblo, en una casa de techo de palma con paredes de cal desconchadas.

La mujer se desesperó.

«Y mientras tanto qué comemos», preguntó y agarró al coronel por el cuello de la franela. Lo sacudió con energía.

-       Dime, qué comemos.

El coronel necesito setenta y cinco años – los setenta y cinco años de su vida, minuto a minuto – para llegar a ese instante. Se sintió puro, explícito, invencible, en el momento de responder:

-       Mierda.                                                                                           París, enero de 1957. 

La expresión más extraordinaria de la vida le servía al coronel para emitir los sentimientos más profundos de amor por su mujer. El tiempo había pasado minuto a minuto en una tira larga de días contados con la esperanza siempre puesta en la llegada del barco trayendo una noticia de su jubilación bien ganada en las luchas de la guerra civil. Los años se enredan y van sumando vida a la novela con cosquillas en los huesos del hambre permanente que se presenta en la necesidad de sobrevivir frente al acoso de la muerte que se asoma por la ventana en la medida en que pasan los años. La historia de un gallo facilita la existencia y le pone granos de  esperanza a su jubilación cada viernes con la llegada del barco.

miércoles, 26 de junio de 2024

En agosto nos vemos

 

Jesús Rico Velasco

 El  portal de la costa caribe colombiana le sirve de fondo a esta novela  del Nobel GGM. Nos da el GPS aproximado en donde ocurren los hechos. Es muy probable que las hordas de turistas, los autobuses destartalados del servicio  publico, la algarabía de los bazares del mercado, y la rotonda de la independencia  con la estatua ecuestre de El libertador montado en un caballo encabritado y la espada esgrimida contra el cielo es una señal de que el lugar podría ser Cartagena. Como siempre el desafío de la ficción permite ubicar los espacios en cualquier lugar del mundo. 


Pablo Neruda el poeta

 


Eduardo Toro

Neftalí Ricardo Reyes Basoalto nació en Parral, Chile, el 12 de Julio de 1904. Desde muy joven se perfiló como una de las más destacadas figuras de la poética hispanoamericana.

 En l.921, con 16 años, no cumplidos, publicó su primer poema, premiado en el concurso de la Federación de Estudiantes de Chile, titulado La canción de la fiesta, con el seudónimo de Pablo Neruda, nombre que acogió en homenaje al poeta checo Jan Neruda y mantuvo desde entonces y solo legalizó, ante notario, en 1946.

La canción de la fiesta: / Un pierrot de voz ancha/ que desata / mi poesía sobre la locura/ y, yo delgado filo de espada negra/ entre Jazmines y máscaras/ andando aun ceñudamente solo( cortando multitudes con la melancolía/ del viento Sur, bajo los cascabeles/ y el desarrollo de las serpentinas/

Ojitos chinos

         “No han visto las estrellas,

ni una sola, ni una

de todas las criaturas de este mundo

desde que la arenas rozaron el viento por primera vez.

Ni una sola, ni una,

ni una bestia de entre todas las bestias que se ha parado

en el prado o la llanura o la colina

Y ha conocido la emoción de mirar esos fuegos;

nuestras almas admiran lo que ellas, ¡oh ellas! Jamás han conocido.

Durante cinco mil millones de años han salido volando

girando alrededor de las esferas

pero ni una sola vez en todos esos años

un, león, un perro o un pájaro que atraviesa el aire

ha mirado hacia allí, ¡ah, Dios! A las estrellas;

¡oh mira, mira allí!”

R. Bradbury

                               Alexandra Correa

 


  “Tienes los parpados caídos, opérate”, dijo mamá. 

 De manera rápida escondo una lágrima, inútilmente trato de explicarle que soy feliz así y no deseo cambiar mi fisionomía, es insistente y para todo tiene una respuesta, dejo que hable sola porque lo último que deseo es sumergirme en una discusión. Le doy un beso en la frente y me despido.

 Miro los ojos en el retrovisor, me causa tristeza saber que no está conforme a lo que soy ¿Por qué querría cambiármelos?

viernes, 14 de junio de 2024

Segunda opinión medica: buscando a Dios y persiguiendo al Diablo

 Jesús Rico

En una historia anterior que apareció con el titulo “ Cómo convertir el diagnóstico de un cáncer en un cuento”, referí que el informe de patología decía, «carcinoma escamo-celular, variante basaloide (cloacogénico). Compromete toda la biopsia». Un resultado desafiante que  parecía incuestionable  dio lugar al ingreso en la ruta de manejo oncológico . Un proceso de búsqueda para encontrar evidencia científica suficiente para apoyar el diagnóstico. Una radiografía de tórax con resultados normales, una resonancia magnética negativa para enfermedad metastásica medible en la pelvis y abdomen  y una tomografía, que no apoyaron los resultados de la patología. Ante la insuficiencia de evidencia se siguió el camino más fácil de meter al paciente a la consulta de un especialista oncólogo radiólogo y un oncólogo clínico de quimioterapia, que tomaron los resultados como ciertos y lo convirtieron en “tumor maligno del ano, parte no especificado ” y determinaron un procedimiento de radioterapia sentenciado por  el médico que en la entrevista no  revisó al paciente  sino que dictaminó, le dijo, «Hay que aceptar la decisión de radioterapia durante  treinta y tres días, y si no se muere ».

 

martes, 7 de mayo de 2024

Filosofía del café

 


Jesús Rico Velasco                                                             

                                                          


                                                                                 
La filosofía del café es un tratado lleno de humanidad que condensa siglos de  vivencias de muchos intelectuales  que tomaron café para adornar su existencia.  Comenta Nicolás Artusi, reconocido periodista argentino por sus libros sobre la historia del café, que el café fue la primera bebida social que un hombre podía beber sin emborracharse en libertad, sin producir variaciones significativas en su comportamiento más allá de poder pensar, hablar, escribir, y conectarse con su mente sin molestar a nadie.

 La cafeína componente esencial del café es un estimulante alcaloide que excita el cerebro y puede ser adictiva; no te hace más creativo, ni puede escribir por su propia cuenta, pero te ayuda a pensar.  No sé si será verdad, pero cuentan que Honore Balzac tomaba cincuenta tazas de café por día como estímulo para su producción literaria, Voltaire 80 tazas por día, y Goethe 60. Es posible que sean exageraciones, pero por debajo hay un mensaje para enredar el café a la producción intelectual de pensadores como Marx quien también gustaba el café, y bebedores compulsivos como Hegel, Lincoln, Rousseau. La mayoría de intelectuales occidentales tomaron café como facilitador  para la producción literaria y filosófica.

martes, 23 de abril de 2024

Cómo convertir el diagnostico de un cáncer en un cuento

 

Jesús Rico Velasco

 Hay cosas extrañas que te suceden cuando has avanzado en la supervivencia sobre la tierra por encima de las ocho décadas de vida y en un estado relativamente saludable. Yo había sostenido en un articulo reciente que sin salud no vale la pena envejecer.  La salud en la vejez es un determinante categórico, el proceso de perderla puede ser largo y doloroso. El bienestar es casi una virtud en los años avanzados, que resulta de una combinación del cuidado  biológico, psicológico y  social.

Qué pasa por tu mente cuando por algo aparentemente insignificante como un lipoma (grasa) de  menos de dos centímetros, que ni siquiera molesta, en la cercanías del ano, decides hacértelo operar y el medico cirujano muy alegre te dice: «Es insignificante, lo he palpado y  lo puedo eliminar en una cirugía de diez minutos». Sientes alegría al ver que no tienes nada, que la pequeña bolita de grasa te la pueden eliminar en un abrir y cerrar de ojos. Así que el cirujano te programa una entrevista con la anestesióloga,  que te dice: « No hay dificultad aparente  para realizar la operación independiente de la presencia de su marca pasos.  Preséntese  dentro de ochos días en la sala de cirugía».

Viejos

 

Alexandra Correa

¡Esgar atisbe!, venga pues ayude a amarrar esta bestia. ¿Qué hace allí sentado, tomando tinto y rascándose el ombligo?, ¿Acaso vos pensás que del cielo te va a llover plata? Meni pacá, ayudáme a ensillar el caballo y después hacéte la aguamasa pa los marranos, dice Esneda.  Eh ave maría purísima dame paciencia con está vieja, apenas se levanta comienza a poner pereque, no puede dejar los santos quietos, piensa Esgar. 

Esneda se queja mientras prepara el almuerzo ¿Por qué tuve que escoger por marido a un tipo tan entelerido? ¡Viejo! venga a almorzar. Esgar escupe algunos frijoles duros a lo que ella le responde: con hambre no hay pan duro. 

En la hamaca Esgar se echa la siesta y reniega de su mujer. Esta jetona me tiene cansao con su cantaleta ¿Cuándo será que cuelga los guayos?

 


¡Esgar levántese viejo! Que le está entrando el sol por la boca, vos dormís más que gato con anemia, no se le olvide vaciar la mica. El viejo desperezándose le grita, no por mucho madrugar amanece más temprano, deje la azaradera.

lunes, 15 de abril de 2024

Un fantasma en Cañasgordas

 Jesús Rico Velasco

 Muchos años han pasado desde que compartí unas cortas vacaciones con mis primos en la Hacienda Cañasgordas, antigua residencia del Alférez Real.

 

Tres veranos consecutivos alegraron nuestras vidas de adolescentes en una hermosa casona construida en el siglo XVII. Recuerdo un fin de semana cuando visitaba a mis primos que vivían en el centro de la ciudad, en una casa grande, a dos cuadras de la plaza de Caicedo, de la Catedral. Se le ocurrió a mi primo preguntarme ¿Te gustaría pasar con nosotros unas cortas vacaciones en la hacienda Cañasgordas? Por supuesto que sí, sería un placer compartir unas vacaciones de verano en la Hacienda». Invitado y con el beneplácito de la tía Griselda, él me miró con sorpresa y dijo: El próximo sábado a las siete de la mañana debes estar aquí con una maleta pequeña con lo que necesites para el viaje, sin olvidar el traje de baño, la pijama, unos bluyines,  camisetas de verano y buenas botas.

Miedo


Tomo el último sorbo de café, mientras leo en el periódico: “Hombre descuartiza a mujer y la mete en una maleta”, “Roban y acribillan a un hombre en el metro”, “Violan y asesinan niña”. Voy a la cocina, la nevera está vacía. Observo por la ventana a la multitud caminando. Llamo al supermercado. Mientras, enciendo un cigarrillo, cierro los ojos y cuando los abro las llamas me consumen.

Alexandra Correa